Tras la histórica y humillante goleada sufrida ante Boca en el último Superclásico en Mendoza, River se presentó en el Monumental, con el objetivo aprovechar la oportunidad de revertir su mal momento en la primera final de la Recopa Sudamericana ante San Lorenzo.
En los primeros movimientos, el equipo de Edgardo Bauza pareció estar más concentrado. Una mala salida de Teófilo Gutierrez le dio la posibilidad a Enzo Kalinski de asistir a Martín Cauteruccio para dejar al delantero mano a mano frente a Marcelo Barovero. Sólo por el imperfecto dominio del ex Quilmes la jugada terminó en los guantes del arquero. A partir de esa amenaza, el «Millonario» tomó mayor protagonismo.
Un preciso centro de Rodrigo Mora encontró la cabeza del colombiano y Teo impactó un frentazo que hizo lucir a Sebastián Torrico. Con un manotazo derecho, el ex Argentinos y Godoy Cruzevitó la conquista local, pero la agresividad de la banda se imponía en el Antonio Vespusio Liberti.
La fórmula del éxito parecía ser la combinación entre el oriental y el cafetero. Otro centro de Mora y otro testazo del atacante con pasado en Racing, hicieron lucir nuevamente a Torrico. Por los reflejos del guardameta el marcador se mantuvo intacto, dado que la chance de Gutiérrez se produjo adentro del área chica. El gol era cuestión de tiempo.
A la salida de un tiro de esquina, una nueva ocasión de River mereció concluir en la red. Primero con una chilena de Teo que se estrelló en la base del travesaño, y luego con una palomita deJonathan Maidana que rebotó contra el poste. Sin dudas, la fortuna estaba disfrazada de Cuervo.
Antes de que llegue el descanso una nueva triangulación ofensiva generó suspiros en las tribunas. El toque de Carlos Sánchez hacia Mora sirvió para filtrar a la última línea de Boedo, pero la ausencia de eficacia del charrúa hizo que el entretiempo se mantenga igualado.
El complemento comenzó con polémica. En una escena en la que estuvieron involucradosBarovero y Cauteruccio, los del «Patón» reclamaron un penal que Germán Delfino ignoró. Si bien el colegiado pudo sancionar la pena máxima, la infracción del ex Vélez fue tan imperceptible que justificó la decisión del árbitro.
La notable maniobra de Barrientos, en la que incluyó un lindo caño sobre Maidana, fue alguno de los limitados pincelazos de buen juego que propuso San Lorenzo. El «Pitu» habilitó al uruguayo, pero el delantero tardó una eternidad para conseguir la conquista y la pelota durmió en las manos de «Trapito».
El cambio de intérpretes renovó el aire de un «Millonario» que se había quedado sin ideas. Con los ingresos de Fernando Cavenaghi, Camilo Mayada y Gonzalo Martínez, los del «Muñeco» pudieron quebrar la resistencia blaugrana. Una desgracia de Mercier, perfectamente capitalizada por el «Pity» derivó en el grito de desahogo de Carlos Sánchez.
Si bien la diferencia fue mínima, el 1 a 0 se asemejó más al desarrollo del pleito. La revancha será el próximo miércoles en el Nuevo Gasómetro, con la particularidad de que Edgardo Bauza no podrá contar con Leandro Romagnoli, quien se fue expulsado por una infracción sobre Leonel Vangioni. Sin dudas, River dio el primer paso para coronarse como el mejor del continente.
Infobae