Las intensas lluvias que afectaron a la región han generado serias complicaciones en el Hospital Castro Rendón de Neuquén.
Entre las problemáticas más críticas se encuentran los cortes de energía en el piso donde se atienden pacientes en el área de obstetricia, especialmente a madres recién paridas o en proceso de dar a luz.
Ante la falta de suministro eléctrico, el personal médico y enfermeros se vieron obligados a usar sus teléfonos celulares para iluminar el área, enfrentando condiciones adversas en medio de la lluvia torrencial.
Juan Millapan, delegado de ATE Salud, hizo eco de la difícil situación en una entrevista en medio radial, donde destacó que «se han producido filtraciones en varios servicios, lo que llevó al cierre del servicio de hemoterapia debido a que el agua afecta a los equipos médicos».
Asimismo, el delegado también alertó sobre un incidente crítico, mencionando que un tablero eléctrico estuvo al borde de incendiarse debido a las condiciones climáticas adversas, con un fuerte olor a quemado en el hospital.
Por último, Millapan expresó su preocupación por la falta de mantenimiento adecuado, señalando que las empresas privadas contratadas para realizar las tareas de limpieza y reparación del techo no cumplen de manera efectiva con sus responsabilidades. A pesar de los intentos previos de cambio de techo en el hospital, la situación se repite en cada temporada de lluvias, lo que genera una situación insostenible para el personal y los pacientes.