Buenos Aires.- El Instituto Estadístico de los Trabajadores presentó en el Salón Rucci el índice de inflación de los empleados asalariados en el último mes, el cual sufrió el efecto de la readeacuación de los cuadros tarifarios del consumo de gas domiciliario, tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia que obligó a las distribuidoras a retrotraer en agosto el incremento que habían dispuesto en abril, hasta tanto se cumpliera con la exigencia normativa del llamado a Audiencia Pública, en septiembre.
Y si bien, a los efectos de la elaboración del Índice de Precios, se ingresó en la planilla de cálculo una suba de la tarifa de gas de 239,4%, lo cierto es que muchas familias recibieron la factura del mes con cero peso a pagar, porque habían abonado por anticipado el incremento que se dispuso en abril, y por tanto por un par de bimestres tendrán un saldo favor con sus prestadoras.
En ausencia de ese efecto el estudio estimó que la inflación de octubre se hubiera ubicado en 1,4%, como en septiembre, levemente por debajo de las estimaciones de mercado que informó el Banco Central de la República Argentina en el Relevamiento de Expectativas de Mercado, de 1,5% a 1,6%, con una proyección inferior a 20% a doce meses vista.
El relevamiento de 170.000 precios diarios determinó que en octubre el 73,9% de los productos mostraron aumentos y 17,2% acusaron deflación, en su mayor parte asociada a fenómenos estacionales, y a la flexibilización de ajuste de algunos bienes y servicios regulados por el Gobierno.
Según el IET «en los últimos doce meses la inflación para los asalariados registrados jefes de hogar fue de 42,5% y provocó una caída del poder de compra de 6,6 por ciento».