Neuquén.- El hogar para chicos y jovenes en situación de calle, que se encuentra en la calle Rivadavia 828 de la ciudad de Neuquén, tiene sus puertas cerradas desde noviembre de 2016.
La mayor problemática del lugar son las cloacas. Los desbordes de materia fecal no permiten utilizar las instalaciones y los trabajadores aseguran que pidieron asistencia y hasta el momento no la han recibido.
Asimismo, apuntan contra EPAS y el Gobierno provincial por no generar soluciones al problema edilicio. «Había compromiso de una mudanza a una casa nueva, el 15 de enero. Llegada esa fecha no hubo ninguna solución y enviamos una nota pidiendo una respuesta en 72 horas. Los plazos ya se vencieron y decidimos visibilizar la situación», explicó Roberto Bobadilla, trabajador del hogar.