Argentina.- Frente al inicio de la segunda ola de contagios, el Gobierno comenzó a analizar restricciones en diferentes provincias. Ante esta situación, durante un encuentro virtual del que participaron los ministros de educación de cada provincia, se acordó que las clases presenciales no se suspenderán.
Los funcionarios argumentaron que la evidencia disponible, tanto a nivel nacional como internacional, refleja que la actividad escolar «no potencia los contagios del personal docente o de los estudiantes».
«Ratificamos la decisión acordada federalmente de sostener la presencialidad cuidada en nuestras escuelas. Esta decisión nos obliga a continuar ejerciendo un permanente seguimiento de la situación epidemiológica en cada una de las jurisdicciones, asumiendo que existen responsabilidades ineludibles para el retorno a una presencialidad, que nos convoca a un trabajo compartido entre el Estado nacional, los gobiernos educativos de cada jurisdicción, los equipos docentes y directivos, las y los estudiantes y familias”, expresaron en un comunicado que emitieron conjuntamente Nación y las 24 jurisdicciones.
Además durante la sesión, se remarcó la necesidad de sostener los protocolos de cuidado tanto en los establecimientos educativos, como en las actividades sociales a las que asistan los niños y adolescentes.