Rio Negro.- El segundo satélite geoestacionario argentino construido en Bariloche por Invap entró ayer en la fase de maniobras que lo llevarán el mes que viene a la Guayana Francesa, donde, al igual que su hermano mayor, el Arsat-1, será lanzado al espacio. Partirá el martes que viene de Bariloche a bordo de uno de los enormes aviones de la flota de la empresa rusa Antonov.
Por la posición orbital que ocupará, podrá vender sus servicios de enlace de datos, televisión y telefonía, a América del Norte y Central, un mercado que podría significar un recupero más rápido de la inversión.
Invap, la empresa estatal rionegrina que no para de crecer en Bariloche, es la constructora del satélite, cuyo dueño es otra empresa pública pero nacional, Arsat.
Funcionarios del ministerio de Planificación Federal están en Bariloche para seguir de cerca las maniobras de embalaje del satélite. El martes habrá, como ocurrió el año pasado con la despedida del Arsat-1, un acto oficial en el aeropuerto.