Neuquén.- El paro convocado por el sindicato de Petroleros Privados, tras la muerte de un operario en Rincón de los Sauces tuvo un alto en toda la Cuenca Neuquina. También se sumaron los sindicatos de Petroleros Jerárquicos que dirige Manuel Arevalo y la seccional Uocra de Rincón de los Sauces.
Desde la organización, que conduce Guillermo Pereyra, se garantizaron las guardias mínimas de mantenimiento pero la mayoría de las actividades se vieron afectadas. No se completaron ni perforaron pozos, solo se mantuvo la producción estable. En algunos yacimientos la adhesión fue total.
Pereyra ayer disparó contra las operadoras y el Gobierno nacional en la denominada Mesa de Vaca Muerta. Exigió que se controle y se cumplan las medidas de seguridad necesarias en los yacimientos. Además, insistió con la revisión de los diagramas laborales para conseguir mejores condiciones de descanso para los trabajadores.
Asimismo, Pereyra aseguró que por pedido del gobernador Omar Gutiérrez el paro no se realizó con afectación a la producción que es lo más sensible en las medidas del sector.