Neuquén.- En la tarde de ayer se realizó una marcha en el cementerio El Progreso, ubicado entre las calles Abraham y Combate de San Lorenzo.
El pedido unificado fue por justicia para Rodrigo Quevedo, el joven que se quitó la vida a raíz de los abusos que sufrió cuando era pequeño, por parte de un vecino del barrio.
La familia espera el llamado de la fiscalía para presentar a los testigo. De iniciarse un juicio, sería el primer caso en la provincia que se realiza sin la victima presente.