La Pampa.- Diego Loza desapareció en la noche del 23 de junio y, cuando la policía entró a su departamento, el joven de 34 años fue encontrado envuelto en una frazada, atado de pies, manos y debajo de una parrilla. Tenía un disparo en la boca, otro en un brazo y uno en el pie.
Los detalles del hecho se dieron a conocer en las últimas horas, y según la investigación los ladrones lo asesinaron y se quedaron varias horas dentro del departamento con el cadáver. Mientras decidían cómo seguía su macabro plan, pusieron a la venta en las redes sociales el televisor de su víctima. «Nuevo. En su caja original», anunciaba en el posteo.
Además, los criminales compraron pizzas y empanadas con unas cervezas en lo que parecía una fiesta. Estuvieron unas 48 horas en el lugar del asesinato hasta que llegó la policía y escaparon.
La Policía los identificó por la comida que dejaron aún caliente en la cocina del departamento. Siguiendo las pistas de la cámara de seguridad de una rotisería, dieron con la identidad de los ladrones.
Walter Pedraza y un menor de edad, ambos de oficio albañiles, están detenidos. Se los acusa de «homicidio calificado triplemente agravado”.