Buenos Aires.- De manera sorpresiva, Gonzalo Rúa, juez en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la ciudad de Buenos Aires, dispuso la liberación de 23 trapitos detenidos el último fin de semana durante los recitales que la banda inglesa Coldplay llevó a cabo en el estadio de River Plate.
Además, el mismo magistrado no dictó la prisión preventiva contra tres de los cuidacoches que golpearon y le cortaron la cara a otro hombre que estaba trabajando esa noche en Núñez, algo que le valió fuertes críticas en el ámbito judicial porteño.
Ocho de los detenidos el sábado ya tenían antecedentes y, a pesar de esto, Rua les otorgó la libertad.
Los infractores cobraban por estacionar el auto en el marco del concierto de Coldplay. Pedían hasta 9.000 pesos a los automovilistas por vehículo.
En conjunto con personal de la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y las Comisarías Vecinales 13A y 13B se labraron 40 actas de las cuales 21 estuvieron vinculadas a los denominados trapitos.
En tanto, la Policía también labró actas contra vendedores ambulantes de prendas de ropa y de comida, que no poseían la habilitación correspondiente.