Neuquén.- Las bajas temperaturas que se han registrado en las últimas horas en la zona de El Bolsón están dando un pequeño respiro a la región y a los brigadistas que trabajan incansablemente para controlar los incendios forestales.
Por las precipitaciones se redujo la intensidad de los incendios y el humo, lo que permite a brigadistas y medios aéreos avanzar en la contención y control de las llamas.
Aunque la situación sigue siendo delicada, las autoridades confían en que las condiciones climaticas continuarán ayudando. Así lo expresó Carlos Banacloy, ministro de Desarrollo Productivo de Río Negro, en contacto con La Red Neuquén.
El funcionario remarcó que «la emergencia esta declarada tanto ígnea como económica y social, se deben reconstruir viviendas y asistir a aaquellos productores que perdieron todo».
«Cabe decir que El Bolsón perdió turismo debido a la emergencia y eso afecta a la economía de muchos vecinos, agregó.
Banacloy también opinó sobre la situación judicial por los incendios forestales intencionales. «Las áreas afectadas no son loteables o vendibles, es tierra provincial y nacional. Incluso en Neuquén es un parque nacional con lo cual es aún más imposible que suceda algo así. La sensación es que hay una planificación detrás. Por nuestra parte trabajamos contra el fuego y dejamos que actúe la Justicia «, afirmó.
El funcionario provincial lamentó que Río Negro no cuenta con aviones hidrantes y destacó el apoyo de Nación tanto en lo económico para reconstruir viviendas como en personal para diferentes tareas. «Contamos con un campamento y soldados del Ejército Argentino que asisten a combatientes y brigadistas», indicó.
En paralelo, la sociedad argentina muestra una vez más su apoyo y solidaridad con las comunidades afectadas por la crisis ambiental y social.