Francia.- El 7 de enero de 2015, dos hombres del ISIS enmascarados y armados con fusiles ingresaron en la redacción de la revista satírica francesa Charlie Hebdo, dispararon hasta 50 tiros, mataron a 12 personas e hirieron a otras 11 al grito de «Allah es el más grande».
Hoy, a dos años del atentado, la publicación saca un número especial en el que califica al ataque como «crimen político» y pese al cual asegura que seguirá en su línea periodística. En su portada, bajo el título «2017, por fin el final del túnel», un hombre mira asustado el cañón de un fusil con el que un jihadista le apunta.
El director de la publicación, Riss, afirmó que «el del 7 de enero no es un atentado como los demás», sino «un crimen político» cuyo objetivo fue tanto suprimir ideas como a quienes las proclamaban». Ese día, «las víctimas fueron asesinadas a causa de sus opiniones políticas, de sus escritos políticos, de sus dibujos políticos publicados en el diario político Charlie Hebdo».