Río Negro.- El juez federal Leónidas Moldes hizo lugar al amparo colectivo presentado hace 9 años por impulso de la Defensoría del Pueblo de Río Negro, para poner límite a la contaminación del lago Nahuel Huapi y ordenó a la provincia que ejecute en sólo un año las obras de saneamiento.
El fallo aclaró que en caso de no cumplir con la condena, los funcionarios responsables se exponen a recibir sanciones económicas “proporcionales al costo de las obras”.
El trámite se extendió por casi una década, en la cual hubo un largo diferendo por cuestiones de competencia, que debió ser saldado por la Corte Suprema. El juez consideró probado el daño ambiental que causa el vertido al lago de efluentes cloacales sin tratar y también el perjuicio que generan las conexiones domiciliarias indebidas a la red cloacal en el barrio Melipal.