Italia, Roma.- Diversas organizaciones católicas de todo el mundo enviaron una Carta Pastoral sobre las vacunas contra el COVID-19, en la cual manifestaron la satisfacción por su realización y por la implementación de técnicas que evitan el uso de embriones humanos.
«Hoy, gracias al esfuerzo de tantos hombres y mujeres de ciencia, vemos una posible luz al final del camino con las vacunas contra el Coronavirus. Es una inédita carrera contra el reloj que admiramos, reconociendo, al mismo tiempo, el valor de estas investigaciones que repercuten en bien de la humanidad», se lee en el documento.
Tras elogiar la rapidez del desarrollo de las vacuna, el escrito informa que las dos que hasta el momento fueron aprobadas (la de PfizerBioNTech y la de Moderna), han sido realizadas con «novedosos métodos» computarizados.
“Para la tranquilidad de todos y todas, es importante añadir, que los expertos en este campo aseguran que estas vacunas no amenazan la riqueza y la singularidad genética del ADN humano. A estos avances de la ciencia reaccionamos con gran entusiasmo y esperanza. Las dos vacunas no utilizan en su producción líneas celulares de embriones humanos provenientes de abortos o fetos. Nno existe ninguna objeción moral», relata la Arquidiócesis.
Otro capítulo del documento señala que recibir estas dos vacunas es un «bien mayor público y personal» y que por lo tanto, «no pueden ser un privilegio para unos pocos y se debe anteponer a cualquier oportunidad de lucro».