Mar del Plata.- Un chico de 7 años se disparó mientras jugaba con el arma de su padre que estaba en la guantera del auto y permanece internado en coma farmacológico por las lesiones cerebrales que le provocó la herida.
Al llegar al hospital el niño ya no presentaba signos vitales. Los médicos mediante trabajos de reanimación, lograron que recuperara su pulso. Allí fue cuando lo trasladaron hasta el Hospital Materno Infantil de la ciudad balnearia, donde fue sometido a una cirugía y continua internado desde anoche en el departamento de cuidados intensivos.
Fuentes de la investigación confirmaron que durante la operación se logró extraer el proyectil calibre 32, que había ingresado por la frente y quedado alojado en la nuca. Pero advirtieron que en caso de recuperarse, la víctima acarrearía importantes secuelas debido a la magnitud del daño provocado en la masa encefálica.
El padre del niño no tenía el arma registrada y tampoco tenía permiso de uso y/o portación, por estos motivos quedó imputado por lesiones culposas.
El accidente se produjo en el barrio La Armonía, a 20 kilómetros del centro mar platense por ruta 2, en momentos en que el hombre cortaba el pasto y su hijo lo esperaba en el auto.