Neuquén.- En horas de la madrugada de ayer miércoles, mientras la Municipalidad de Neuquén llevaba adelante una limpieza de la Ruta 22, inspectores de Tránsito observaron a una ambulancia en conducción temeraria.
Al detener su marcha, confirmaron que el conductor tenía 1.4 gramos de alcohol por litro de sangre.
El hecho insólito lo dio a conocer el subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana, Francisco Baggio, quien indicó que el vehículo fue secuestrado, retenida la licencia del chofer profesional y puesta la infracción a consideración del Tribunal de Faltas.
“La ambulancia circulaba a alta velocidad, sin la sirena, haciendo maniobras zigzagueantes, y de hecho traspasó el control de tránsito sin hacer caso a la advertencia de disminuir la velocidad porque se encontraba un sector de la arteria cortada aproximadamente a 200 metros de allí”, explicó.