Neuquén.- El área de Tránsito del municipio neuquino informó que durante el fin de semana hubo 700 controles en la ciudad, con 380 test de alcoholemia. En total, fueron 44 los casos de alcohol al volante.
Según se informó, la graduación más alta detectada fue de 2,31 gramos en sangre. Además, hubo 28 vehículos secuestrados y más de 87 actas de infracción.
El titular del área, Facundo Churarrín, estimó que hubo una “notable disminución de conductores ebrios”. “Estábamos en el orden de un 20% y pasamos a un 11%”, expresó.
Churrarín señaló que la cantidad de controles de alcoholemia que se realizaron estuvo relacionada a la incorporación de inspectores nuevos en el turno del fin de semana y los feriados.