Capital Federal.- El ministro de Justicia, Germán Garavano, pidió que la jefa de los fiscales, Alejandra Gils Carbó, «se tome licencia» hasta que se resuelva su situación judicial y advirtió que su proceso de destitución será «un tema central» en la agenda parlamentaria para después de las elecciones legislativas.
Luego de que el juez Julián Ercolini procesara por fraude al Estado a la funcionaria designada por el kirchnerismo, Garavano sostuvo que esta decisión «crea por primera vez una situación de crisis institucional en la Argentina en cabeza de quien debiera ser garante» de la Justicia en el país.
En ese sentido, el ministro admitió que la ofensiva del Gobierno contra Gils Carbó «puede ser considerada una cuestión política», pero remarcó que «no es una cuestión política partidaria sino institucional”.
“Si nosotros no tenemos un procurador que es respetado por sus pares y que pueda liderar este proceso de transformación siempre vamos a tener un sistema penal rengo», consideró.