Neuquén.- Tras reiterados abusos de un padre a su hija durante dos años, la madre al constatar el embarazo procede a radicar la denuncia en la fiscalía en marzo de 2020. La menor de edad tenía 14 y no se le practicó la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) porque cuando logró develar la pesadilla ya cursaba el sexto mes de gestación y podía existir riesgo para la salud de la adolescente.
Ni bien nació la criatura se realizó el ADN que demostró científicamente la paternidad de su padre. Cuando lo fueron a acusar, el hombre se fugó y fue atrapado este fin de semana en Roca.
El juez, Gustavo Ravizzoli, dio por formulados los cargos contra el hombre por el delito de abuso sexual con acceso carnal continuado, agravado por el vínculo y por ser el imputado el responsable de la guarda.
Luego de realizada la cámara gesell y las pericias de ADN, cuando el padre de la menor debía presentarse a la audiencia de formulación de cargos, en diciembre de 2021, no logran ubicarlo, declarándose la rebeldía y dictándose la orden de captura. El día viernes, el hombre fue ubicado en la ciudad de Roca y trasladado a Neuquén.
Ante la evidente presunción de que el hombre podría volver a profugarse, es que el juez de garantías dictó, a pedido la fiscalía y de las partes querellantes, cuatro meses de prisión preventiva como el único medio posible para cautelar el proceso, el mismo tiempo que durará la investigación.