Tandil.- Con la firme intención de no repetir en este 2015 lo malo que fue el pasado 2014, Boca fue uno de los primeros equipos en regresar a los entrenamientos y comenzar con la pretemporada. De hecho, el plantel que comanda Rodolfo Arruabarrena ya se encuentra en Tandil, donde realizará la parte más exigente de los trabajos.
En este contexto, el entrenador «xeneize» ayer recibió una noticia inesperada y que lo sacó de su habitual tranquilidad. Los dirigentes le informaron que se había complicado la continuidad de Juan Forlín, algo que era prioridad absoluta para el DT. ¿Por qué sucedió esto, teniendo en cuenta que parecía todo confirmado? Habrían surgido diferencias con el Al-Rayyan de Qatar, club dueño de su pase, en lo que respecta al nuevo préstamo.
Pero esta tarde, la continuidad del marcador central se frustró por completo a raíz de la negativa de los qataríes de ceder nuevamente el jugador. De esta manera, Daniel Angelici y compañía dieron por finalizadas las conversaciones y comenzaron la búsqueda de otro candidato para ocupar el puesto vacante. Desde luego, el entrenador «xeneize» pegó el grito en el cielo por la imposibilidad de contar con un hombre que contaba como titular indiscutido.
Luego de ‘digerir’ la noticia, enseguida el «Vasco» comenzó a pensar en cómo suplir a al futbolista que volverá a desempeñarse en la exótica liga. Y allí, les hizo saber a los dirigentes la necesidad de ir en búsqueda de un reemplazante. ¿El apuntado? Fernando Tobio, quien actualmente está en el Palmeiras. El ex jugador de Vélez quiere irse de Brasil y ya le comunicó a su representante que tiene intenciones de jugar en Boca. Por ahora, sólo existieron sondeos.
A su vez, Arruabarrena también les comunicó la imperiosa necesidad de sumar urgente un lateral, considerando que los pases de Nicolás Tagliafico y Milton Casco ya están descartados. Y el que está más cerca es Martín Aguirregaray, el uruguayo que se desempeña en Estudiantes. El acuerdo con el jugador ya existe; aunque el «Pincha» no se muestra con intenciones de desprenderse del lateral. Sin embargo, como el club platense tiene una deuda con el grupo empresario dueño del 60 por ciento del pase (por la compra del 40 por ciento), esto podría permitir la salida del «charrúa».
Por otra parte, el entrenador sigue insistiendo con la incorporación de otro uruguayo. Se trata de Nicolás Lodeiro, con quien se mantienen las charlas y quiere jugar en Boca. ¿Qué se lo impide? El Corinthians se mantiene firme en su postura de no ‘largarlo’; mientras que también existen diferencias en lo económico y en la extensión del contrato del futbolista. Los dirigentes «xeneizes» no son optimistas en su llegada.
(Fuente: Infobae)