Neuquén.- Mauro Millán, subsecretario de Planificación y Servicios Públicos, habló sobre los hechos acontecidos el fin de semana e indicó que “el día sábado en la calle El Jarillal, en el oeste de la ciudad, ocurrió un hecho sin precedentes en el servicio. Desde el municipio se estaban haciendo conexiones cloacales de forma irregular, es decir, sin aviso previo al EPAS y ni solicitando documentación de planos de instalaciones ni solicitando la factibilidad para la conexión cloacal, ni inspección por parte del personal del EPAS”.
“Lo hicieron en total anonimato, sin utilizar las piezas reglamentarias, ni inspeccionándolo por parte del municipio, porque tenemos entendido que es una empresa tercerizada por el municipio”, agregó.
A su vez, explicó que “el día sábado nos avisan desde la base del EPAS, que el municipio había dañado el acueducto principal de la zona oeste queriendo conectar cloacas. La cuadrilla del EPAS se puso a trabajar de manera paliativa con el fin de no dejar a todo el oeste sin agua. Digo paliativa porque aún no se ha podido reparar de forma definitiva debido a la magnitud del daño que se provocó en el acueducto”.
“Es obsoleta esta negligencia con la que trabaja el municipio, no pide que vaya personal del EPAS que vaya a constatar o a asesorarlos, o inclusive darle la documentación necesaria en carácter de este tipo de obras”, denunció.
Finalmente, concluyó: “Realmente una gran preocupación con este municipio que no nos deja sorprender todos los días, no sólo por su inacción sino con el afán de echar culpas a los demás para esconder su incapacidad”.