Córdoba.- Más de 20 perros aparecieron muertos la última semana en las calles de la localidad cordobesa de Carrilobo. El veneno era camuflado en trozos de carne. Hay un vecino sospechado por los crímenes.
La matanza comenzó hace algunos días en ese pueblo de 2.000 habitantes, ubicado a unos 150 kilómetros de la capital provincial. Allí, los animales comenzaron a aparecer en la calle muertos.
Las autoridades locales determinaron que todos los perros comieron una sustancia venenosa oculta en trozos de carne. Se encargaron estudios a la Facultad de Veterinaria de la Universidad Nacional de Río Cuarto.
La Policía sospecha de un hombre y realizó un allanamiento en su domicilio, donde se encontraron elementos que podrían comprometerlo.