«Deseo confirmar mi cercanía con las poblaciones golpeadas por un fuerte terremoto en Nepal y en los países colindantes», dijo el pontífice.
«Rezo por las víctimas, por los heridos y por todos los que sufren por esta calamidad. Que tengan el apoyo de la solidaridad fraterna», agregó el Papa, según reproduce la agencia EFE.
A continuación el pontífice comenzó el rezo del avemaría, seguido por los fieles en la plaza, que hoy apareció llena de personas que acudieron para asistir a la oración habitual de los domingos en este lugar.