Neuquén.- Ayelen es madre de 5 hijos menores de edad y en la última semana se instaló en una casa deshabitada en el barrio Cuenca XVI. La Justicia neuquina la intimó y este lunes podría ser desalojada.
En diálogo con TU NOTICIA contó su historia y como llegó a tomar la decisión drástica.
«Hace 15 años que estoy anotada en el Registro Único Provincial de Vivienda y Habitat. Nunca me dieron una solución y en la actualidad vivía con mi padre. Tuve una discusión con él porque mis hijos moelstaban y me fui. No tenía donde ir y sabía que esta casa estaba abandonada», explicó.
Al llegar, la mujer encontró una vivienda que nunca había sido habitada. «Estaba sucia y se nota que ni siquiera hubo gente durmiendo. Me apena porque una persona fue beneficiada con una casa y somos miles esperando por una», aseveró.
También destacó que los vecinos de la cuadra apoyan su presencia en la residencia. «Me contaron que hubo personas un par de veces y que únicamente hicieron fiestas. Al lado vive una abuela y atrás una mujer sola. Entienden que mi familia no va a generar problemas», comentó.
Sobre el rol de IPVU, señaló: «Vino una persona a decirme que me vaya y que en los próximos días me llaman a una reunión. Yo no voy a irme de acá hasta ver una solución real».
En esa línea, agregó que desde la policía le informaron que el lunes estaría llegando la orden de desalojo emitida por la Fiscalía. «Yo sé que es un delito, lo sé desde el principio. Tomé esta decisión porque no se donde vivir. Mantener un alquiler es imposible y tengo que elegir entre pagar un alquiler o comer», sentenció.
Por último, aseguró que se presentó una persona en el inmueble con intenciones de echarla por la fuerza. «El hombre es la pareja de la propietaria y pateó la puerta estando con mis hijos adentro. El momento fue muy violento y llamé a la policía», afirmó.