Buenos Aires.- Ni papeles en default, ni dólar blue ni las joyas de la abuela. Las declaraciones juradas de Cristina y sus ministros muestran que, como muchos argentinos que pueden ahorrar, una de las especias favoritas para hacerlo son los ladrillos.
Cristina, autoproclamada abogada exitosa ante los estudiantes de Harvard, posee la mitad de 28 inmuebles. Tiene dos departamentos en Capital Federal (uno de 160 metros cuya participación cotizó en llamativos 17.586 pesos, y otro de 392 metros comprado en 2011, que cotizó en 110.000 pesos); cuatro casas (dos de los cuales cotizó a 7.753 y 9.753 pesos), diez departamentos y dos locales en Río Gallegos y cinco terrenos en Calafate. Ahí, en su “lugar en el mundo”, Cristina también es dueña del 50% de una casa y de dos locales comerciales de gran superficie.
No tiene un perfil muy alto en el gobierno, pero el tucumano ministro de Salud, Juan Manzur, supera a su jefa en cantidad de inmuebles anotados a su nombre. Son 28, entre los cuales hay para todos los gustos y colores: tres casas, un local y seis terrenos en Tucumán; dos departamentos, cuatro cocheras y tres terrenos en Capital Federal; siete terrenos en San Juan y otro en Mendoza; y un departamento con ubicación difícil de encontrar: queda en la localidad du e San Miguel de Tucumán pero la provincia es la CABA. Entre tanta exuberancia hay algunas perlas: diecisiete terrenos y uno de los departamentos tienen valuación cero.
El jefe de Gabinete Jorge Capitanich es dueño de cinco inmuebles. Otro hombre influyente del gobierno, Axel Kicillof, tiene una casita en Capital que valuó en 282.000 pesos y a la que le hizo reformas por 121.600 pesos, y también posee una casa y dos terrenos en Uruguay. Es el único ministro que declara propiedades en el exterior.
Florencio Randazzo, ministro del Interior y precandidato presidencial, declaró poseer diez inmuebles. Vive en un caserón de 800 metros cuadrados en Gonnet, cerca de La Plata, que sale 622.000 pesos. Además, destina a alquiler una casa, un departamento y una baulera en La Plata, una casa, un departamento, una cochera y dos bauleras en su natal Chivilcoy, y un departamento en Mar del Plata.
Carlos Tomada vive en una linda casa de Capital cuya titularidad comparte en mitades con su esposa. También posee un departamento en la Ciudad y distintos porcentajes de una quinta y dos terrenos heredados en el municipio de General Pueyrredón. Suena un poco barato, eso sí, que el 26,6% de dos lotes de 200 metros cuadrados cuesten 727 pesos, menos que una camisa de buena calidad.
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, declaró una sola propiedad: una casona de 500 metros cuadrados en Rosario que cotiza a 53.680 pesos.
Un caso especial es el de Julio De Vido: pese a que se lo vinculó a la posesión de varias propiedades, como una vistosa mansión en un barrio privado de la ciudad bonaerense de Lima, el ministro de Planificación Federal sólo admite poseer la mitad de un departamento de 56 metros cuadrados en Buenos Aires que vale $ 34.000. Tampoco tiene acciones en ninguna sociedad que pudiera ser dueña de alguna de las propiedades que frecuenta don Julio.
Alicia Kirchner apenas admite tener un terreno de 1.666 metros cuadrados en El Calafate, con un valor de $ 11.000.
Otro que no tiene casa propia es el canciller Héctor Timerman.