Buenos Aires.- El final de la jornada de domingo en la Superliga reunía todas las expectativas y se despachó con un fiasco: Huracán y Boca aburrieron en el Ducó y empataron sin goles.
Ya desde el inicio, el trámite mostró una dinámica que se convertiría en denominador común de los 90 minutos: fricción en las divididas, imprecisiones que no permitieron buenos despliegues colectivos y una marcada falta de profundidad.
Apenas alguna pelota parada, con el poderío aéreo del Globo por un lado y la buena pegada de Mauro Zárate del otro, constituyeron los momentos más cercanos a lo emotivo.
Quizá la única buena noticia de la jornada fue el regreso de Fernando Gago, quien completó los noventa minutos de juego y no mostró signos de dolor tras las grave lesión ligamentaria de la que se recomponía.
De esta manera, Boca sumó su primer empate en el torneo y quedó con cuatro unidades, al tiempo que el Globo acumuló su segunda igualdad y sigue sin registrar triunfos.