ANEL había aceptado aumentos de 7% el valor punto a principio de este año. Además, se había firmado un ajuste trimestral según el IPC. Sin embargo, y apremiados por la inflación que no se detiene, solicitaron que el ajuste se haga cada mes y no tener que esperar a agosto cuando correspondería el próximo aumento.
El sindicato realizó una asamblea donde mandató a sus autoridades a exigir ese cambio y se juntaron en sala de comisiones el martes a las 8 de la mañana. A las 9 debía reunirse la comisión A de asuntos constitucionales y justicia.
La respuesta fue tan rápida que la sala de comisiones se desocupó antes de las 9. Las autoridades de la Legislatura, con Marcos Koopmann a la cabeza accedió al pedido del gremio.
El acuerdo del principio de año establecía un 10% a cobrar en junio, 5% en julio y la diferencia que quede del acuerdo trimestral con los haberes de julio que se cobran en agosto. Después se va a actualizar mes a mes según el último indicador de inflación.
En medio de una campaña electoral que lo lleva a Koopmann como precandidato a gobernador por la Lista Azul del MPN, lo último que necesitaba era tener conflictos en “su casa”.
Un sueldo de una persona que recién ingresa a la Casa de las Leyes quedó, con el aumento de febrero, en alrededor de 82.000 pesos de bolsillo. Una dirección de área tiene un salario de alrededor de 250.000 pesos. Las y los diputados, que tienen su sueldo atado al de la planta de personal por lo que se conoce como “ley de enganche”, sin el extra por desarraigo para quienes son del interior, quedó en unos 455.000 pesos de bolsillo.