Buenos Aires.- Los afiches comenzaron a verse esta mañana y para sorpresa de propios y ajenos, proponen a algún tipo de cargo electivo a Máximo Kirchner, hijo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
«Máximo al gobierno; Cristina al poder». Con esas palabras, la agrupación kirchnerista Frente Transversal, que integra Unidos y Organizados, inició el operativo clamor en las calles para que el hijo de la primera mandataria compita en las próximas elecciones como candidato a presidente.
En las últimas semanas, sumo fuerzas la idea de llevar el apellido Kirchner en las boletas, sea por Máximo o por la Presidenta. Es que cuatro encuestas que circularon por los despachos oficiales le otorgan a la jefa de Estado una aceptación de su figura de hasta el 45% en el Conurbano, un lugar vital para arrastrar votos y garantizar un triunfo en territorio bonaerense.
Desde distintos sectores del ultrakirchnerismo, ven incluso a Máximo como un buen cuadro político que podría dar pelea en una elección presidencial. Entre sus adherentes se encuentran los camporistas José Ottavis y Juan Cabandié.
El hijo presidencial, que suele mantener su perfil bajo, irrumpió el martes pasado en los medios de comunicación en medio del paro nacional impulsado por los gremios contra el Gobierno en reclamo de cambios en el impuesto a las ganancias. En una entrevista con el periodista Víctor Hugo Morales, en Radio Continental, Máximo Kirchner sugirió que le gustaría competir en los comicios de este año, aunque evitó precisar a qué cargo se postularía.