Buenos Aires.- Sin solución a la vista, la paritaria de Aerolíneas Argentinas se encamina a un conflicto que puede paralizar los vuelos de la empresa estatal. A las 11, los cinco gremios mayoritarios agrupados en la Federación Argentina del Personal Aeronáutico (FAPA) darán una conferencia de prensa para anunciar los pasos a seguir en su reclamo por un aumento del 35 por ciento.
Con duras críticas al titular de la empresa, Mariano Recalde, los sindicalistas denunciaron que la semana pasada el Ministerio de Trabajo informó sobre una reunión que nunca existió. «Vemos un clima enrarecido ya que ni la FAPA, ni ninguno de los gremios miembros hemos recibido notificación alguna de la audiencia mencionada para el pasado viernes, por lo que mal pueden acusarnos de no concurrir a donde nunca nos invitaron», explicaron Edgardo Llano y Rubén Fernández, presidente y secretario de Prensa de la organización, a través de un comunicado.
Los gremialistas confirmaron que sí recibieron una convocatoria para este lunes a las 11 de la mañana, pero cuestionaron que el encuentro haya sido programado a la misma hora que la conferencia de prensa ya anunciada. Por eso, reclaman que sea postergado. «Queremos creer que la superposición de los horarios se debe a un error administrativo ministerial y no a un intento de censurarnos», advirtieron.
La agrupación – integrada por los Secretarios Generales por la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA), la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) y la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) – acusó a Recalde de «mentir sistemáticamente sobre la delicada realidad que vive la aerolínea de bandera» e incluso lo responsabilizaron por la «infantil estrategia de atacar a los trabajadores» ante las «erráticas políticas de gestión» de La Cámpora.
Los sindicalistas denunciaron que el Gobierno tiene la intención de enfrentarlos «con los pasajeros en medio de un lógico proceso paritario». «No nos van a tomar de rehenes ni vamos a ser el chivo expiatorio de Recalde, cuando somos el motor de la empresa», advirtieron.