Italia.- El Papa Francisco invitó a los futbolistas a ser ejemplos para sus admiradores, al recibir a los jugadores de Juventus y de Lazio, que este miércoles disputarán la final de la Copa de Italia. Allí estuvieron Gonzalo Higuaín y Paulo Dybala, los dos argentinos que integran el equipo de la Vecchia Signora.
«Considerando la fascinación y el reflejo que el fútbol profesional tiene sobre las personas, especialmente entre los jóvenes, tienen una notable responsabilidad», les dijo Francisco al recibir a ambos planteles en la Sala Clementina del palacio pontificio. Y aseguró: «Aquellos que son considerados campeones se convierten fácilmente en figuras de referencia, por eso cada competición es una prueba de equilibrio, de dominio de si mismo y de respeto de la reglas».
Francisco, gran aficionado al fútbol y seguidor de San Lorenzo, recordó los episodios de violencia que a veces se producen en los estadios y que «turban el tranquilo desarrollo de los partidos y la sana diversión de la gente».