Capital Federal.- El trabajo judicial de la causa por lavado de dinero que tiene a Lázaro Báez entre sus implicados volvió a sumirse en el hermetismo con la declaración de Fariña. Al cabo de las primeras horas de su indagatoria, el juez Sebastián Casanello reimplantó el secreto de sumario. De manera que ni el tribunal ni la fiscalía que comanda Guillermo Marijuan brindarán información al respecto de momento.
El secreto de sumario permite al juez ordenar medidas sin conocimiento de las partes. Y la primera que se conoció a poco de restablecer ese instrumento fue un allanamiento en Puerto Madero.
El procedimiento se desarrolló esta tarde en Puerto Madero, en concreto en unas oficinas ubicadas en la intersección de las calles Juana Manso y Emma de la Barra. Allí, en el sexto piso, donde funciona una gestoría de seguros, personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) secuestró documentación.
Casanello ya le tomó declaración hoy a Fabián Rossi, quien aparece en el video que salió a la luz semanas atrás en el que se cuenta dinero en la financiera conocida como «La Rosadita». Esta semana el magistrado ordenó arrestar a Báez y a su contador, Daniel Pérez Gadín, quienes fueron indagados hace dos días. Desde entonces ambos permanecen detenidos.