Buenos Aires.- Las matemáticas dicen que Boca aún tiene chances de pelear el torneo local, pero las prioridades de Rodolfo Arruabarrena hacen oídos sordos a los que los números puedan indicar. El año xeneize se definirá el jueves en el Monumental por la vuelta de la semifinal de la Copa Sudamericana y por eso el domingo, ante Independiente, habrá un once en cancha plagado de suplentes.
En esta oportunidad, hasta Agustín Orion tendrá descanso, teniendo por primera vez en el año la custodia del arco Emanuel Trípodi. En cambio, el resto del equipo que estará en cancha mañana tuvo mucho rodaje durante esta temporada, pero en su mayoría suelen ser suplentes y, a lo sumo, tendrán un lugar en el banco el próximo jueves.
Las excepeciones en este aspecto pasan por José Fuenzalida, Federico Carrizo, Emmanuel Gigliotti y Agustín Calleri, cuatro jugadores que pelean por dos lugares como titulares ante River. El Vasco les dará minutos ante el Rojo y probablemente los más destacados se ganen un lugar en la gran cita superclásica. Además, también probará un esquema que podría volver a usar en Núñez, el 4-4-2, similar al que terminó usando el jueves pasado.
En consecuencia, el equipo ante un Independiente que pelea por el título será: Trípodi; Grana, Pérez, Echeverría, Insúa; Fuenzalida, Cubas, Castellani, Carrizo; Gigliotti y Calleri.
Por su parte, el delantero Juan Manuel Martínez salió al campo con un férula que le inmoviliza el tobillo derecho, luego de la grave lesión que sufrió en el superclásico que le imposibilitará jugar lo que resta del año.
Martínez, quien tuvo que salir en el primer tiempo del partido con River del jueves tras un duro cruce de Vangioni, fue al consultorio médico y después estuvo dialogando con el técnico, Rodolfo Arruabarrena, en medio de la práctica de sus compañeros.
El «Burrito» padece una «lesión parcial de la sindesmosis tibioperonea anteroinferior asociada a lesión parcial del ligamento deltoideo», informó Boca, luego de ser revisado el delantero.