Buenos Aires.- El empleo muestra señales de deterioro cada vez más fuertes, de la mano de la caída en la actividad económica. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) admitió ayer, en el informe trimestral de la Encuesta Permanente de Hogares, un incremento de la tasa de desocupación, que pasó de 6,8 a 7,5% de la población activa entre los terceros trimestres de 2013 y de este año. Además, informó una caída en la tasa de empleo (medida sobre la población total) de 42,9 a 41,3%, y en el índice de actividad (personas que trabajan o buscan un puesto), de 46,1 a 44,7%.
Según esos índices oficiales, es posible estimar que, en el término de un año, se sumaron 90.000 personas a las filas de los desocupados, mientras que se perdieron 450.000 puestos de trabajo en la población urbana del país. El motivo por el cual esa destrucción de empleos no provocó un mayor incremento del número de desempleados es que, respecto de un año atrás, hay unas 360.000 personas menos que se declaran laboralmente activas. Esto significa que muchos dejaron de buscar trabajo. La caída en la tasa de actividad es uno de los elementos del informe del Indec que provocan dudas entre economistas: en tiempos en que no sólo cae el empleo sino también el poder adquisitivo de los salarios, por la inflación, lo esperable es que más gente busque generar ingresos.
Fuente: La Nación.