Buenos Aires.- Días después de la asunción de Mauricio Macri como presidente de la Nación, él y su equipo de trabajo apuntaron contra los empleados públicos. Más de 60 mil contratos serán revisados y para ganar tiempo ya han habido despidos dentro de algunos ministerios.
Claro está que es una situación compleja por la perdida de la fuente laboral de muchos hombres y mujeres. Sin embargo, la vicepresidente Gabriela Michetti apoya las decisiones tomadas por el presidente.
«Los nombramientos se produjeron sobre todo en 2015 y hay que mirarlos con detenimiento, tienen que ver con un sector político, en particular con La Cámpora», enfatizó Michetti en una entrevista televisiva.
La dirigente macrista señaló que se están haciendo «auditorías en todos lados» y este tipo de situaciones «se han ido encontrando» en varios ministerios, por lo que una vez que se concluya el relevamiento, los funcionarios de cada área «tomarán medidas del mismo estilo» que ella decretó en el Senado.