Neuquén.- En los últimos 15 días el municipio paralizó 12 obras de gran magnitud e intimó a otras 8 por falta de elementos de seguridad. Estas intervenciones son consecuencia de las inspecciones efectuadas a edificios de más de dos pisos de altura que en lo que va del año exceden las 150 y suman un total de 9 clausuras, 30 paralizaciones y medio centenar de intimaciones.
Las inspecciones fueron efectuadas por agentes de la subsecretaría de Planificación Urbana y su titular, Luis López de Murillas, mencionó entre las irregularidades más frecuentes la falta de bandejas fijas a nivel de la planta baja y de las móviles que deben acompañar la edificación en altura o de paramentos verticales con redes protectoras que evitan la caída de personas u objetos.
“En estas dos semanas se vieron bastantes resultados pero vale aclarar que el operativo abarca todo el año porque a 10 meses de 2015 hemos efectuado 150 inspecciones a obras de gran magnitud, sin contabilizar las que desde el área se hacen a particulares”, aclaró el funcionario.
López de Murillas aclaró que las obras se paralizan cuando el municipio detecta que debe ser mejorada alguna medida de seguridad ordenando el cese sin plazo de las actividades hasta tanto la falta sea remediada.
En cambio, dijo que las intimaciones tienen correlato con faltas menores, como la no colocación del cartel o la mejora de las pasarelas peatonales o de cercos de obra, por lo que se permite seguir trabajando aunque igualmente se da un plazo de entre 24 a 72 horas para solucionar el problema.
La clausura implica la interrupción total de los trabajos y opera cuando la obra transgrede la normativa, como por ejemplo por no contar con habilitación o no haber implementado las medidas de seguridad obligatorias que reducen la siniestralidad. En este caso la infracción se remite al Juzgado de Faltas que hace efectiva la multa al transgresor.
“El mejoramiento de la seguridad lo hacemos entre todos, implica tomar las medidas antes de que ocurran los accidentes” y por eso “apelamos a la responsabilidad de los profesionales de la industria de la construcción, desde directores de obra a representantes técnicos de empresas constructoras y especialistas en Seguridad e Higiene, y a que los obreros tomen conciencia sobre su importancia”.
Sostuvo que estos controles tienen que ver con el nivel de obra que crece en Neuquén y con su posicionamiento como metrópoli en la región patagónica, “tiene construcciones de muchos metros cuadrados y de gran calidad arquitectónica, grandes edificios en desarrollo e importantes inversionistas tentados por una ciudad con potencial y visión de futuro”.