El cansancio y el estrés están derivando en la falta de deseo sexual en la pareja. Esta es una problemática que no sólo afecta a las mujeres sino que también a los hombres. El Slow Sex permite romper con la monotonía y despertar de nuevo la pasión.
Es un encuentro íntimo para potenciar los sentidos: «es una apuesta a conectarse con el otro desde un aroma, un sentir, un perfume o mismo desde la música, que todo el mundo ya sabe lo poderosa que es y cómo nos transporta. Se trata de hacer las cosas sin apuro», resume la sexóloga Mariela Tesler Hansen.
Beneficios del “slow sex”:
-Sensación de bienestar
-Se refuerza el sistema inmunológico
-Eleva el autoestima al conectarse con uno mismo
-Ayuda en la conexión de la pareja
El hecho de conectarse y de hacer este proceso “lento” no significa que se terminan los “rapiditos”, sino que se plantea otra alternativa con grandes beneficios.