Buenos Aires.- El ministro de Economía, Axel Kicillof, afirmó que el juez de Nueva York, Thomas Griesa, no puede interferir en el pago de los títulos de deuda denominados Bonar 2014 que la Argentina emitió bajo jurisdicción y ley local porque se extralimitaría en sus funciones y se arrogaría derechos que exceden a su propio fallo.
El titular del Palacio de Hacienda respondió al pedido que el fondo buitre NML le hizo al juez Griesa para que afecte a los inversionistas interesados e impida el cobro del título Bonar 2024, que la Argentina emitió por un total de U$S 1800 millones, para tratar de hacer fracasar futuras emisiones de este mimo título y otros similares.
«El Bonar 24 es un bono que se emitió para afrontar la indemnización de Repsol y no está relacionado con la reestructuracion de la deuda, ni con los que ingresaron al canje ni con los holdouts. O sea que es un bono que nada tiene que ver con los buitres. Es decir, que si Griesa se va a arrogar el derecho de interceptar cualquier cobro, en cualquier título, el disparate se vuelve absolutamente descrontrolado. Creo que eso no va a funcionar», explicó en una entrevista a Tiempo Argentino.
Asimismo, el ministro criticó nuevamente al magistrado y también advirtió sobre los riesgos que podría traer aparejado una decisión que busque frenar cualquier posibilidad de emisión de deuda de la República: «Si la Argentina no puede pagar un servicio sin antes pagarle a los buitres, en el extremo Griesa podría decir que el país no puede pagar los salarios del Estado sin antes pagarle a los buitres».
En este sentido, opinó que «la interpretación de la justicia norteamericana con el pari passu es bastante ridícula pero claramente no significa que cualquier bono hay que pagarle primero a los buitre».
En cuanto a los elementos que tiene la Argentina para contrabalancear una decisión posible de Griesa sobre este tema, el funcionario detalló: «Creo que para tratar de bloquear el cobro, Griesa buscó incidir sobre los bancos que distribuyen el dinero una vez que la Argentina pagó como lo hizo con el Bony y el Citibank, pero en el caso del 2024 o de otros bonos, no veo que pueda incidir sobre esos bancos».
Fuente: Cronista.