Neuquén.- El intendente Horacio Quiroga entregó esta mañana 103 boletos compra-venta a vecinos de la Colonia Rural Nueva Esperanza en una acto realizado en el salón comunitario de ese barrio. “Hoy otorgamos los boletos para que dejen de ser ocupantes y se conviertan en legítimos propietarios. Estamos dando seguridad, sentido de propiedad que se ejercerá con estos papeles”, dijo el jefe comunal.
Quiroga recordó que “en esta zona no había agua, no había electricidad, eran sólo vecinos con ganas de desafiar la estepa patagónica y producir. Las primeras ocupaciones se dieron en la década del 70, y a fines de los 80 ya había unos 150 crianceros de cerdos”.
“Cuando asumí por primera vez -prosiguió- tomé la decisión de dar destino productivo a estas tierras: primero fue la obra de agua para riego y animales, después el centro de faenamiento -que ahora estamos ampliando- para que no tengan que ir a faenar al centro, y después la energía eléctrica con una inversión muy importante”.
También destacó el hecho de “encontrarme con gente que conozco desde hace muchos años, porque hemos visto juntos el progreso de esta zona y hemos generado mejores condiciones para la producción”.
“Podemos decir con gran satisfacción que hemos dado 103 parcelas y brindando la seguridad de que acá pueden llevar adelante la construcción de su futuro”, indicó.
Por su lado, la secretaria de Desarrollo Humano, Yenny Fonfach, expresó que “este es el comienzo para muchos de un sueño” porque “hay vecinos que están aquí hace muchos años y hoy pueden acceder a este papel tan ansiado”. Además, explicó que “cada uno podrá acceder a la forma de pago que le convenga para luego obtener la escritura, que finaliza el trámite” y subrayó que la ordenanza que aprueba el proceso de regularización dominial de los vecinos de la meseta fue sancionado por unanimidad.
La subsecretaria de Tierras, Lilian Zambrano, precisó que se entregaron los boletos correspondientes a las manzanas 19 a 32 y que se trata de una acción enmarcada “en el plan de regularización que venimos llevando a cabo de los asentamientos que hay en la ciudad”.
“La tarea de regularizar tierras es complicada y lenta, es un proceso que tiene mucho de burocrático y del cual no se ven los avances hasta que se dan a conocer los frutos del trabajo de tanto tiempo como hoy”, añadió.