Neuquén.- Tras varios intentos en las últimas décadas, la calle Ignacio Rivas estará abierta por completo en 30 días con el fin de dar la interconectividad vial que requiere Neuquén capital.
Actualmente, la traza de la calle está interrumpida a la altura del arroyo Durán por cuatro familias que viven allí, dos de las cuales están radicadas hace 25 años en el lugar y las otras hace más de una década.
Después de tratativas, ya hace unos meses, los vecinos acordaron trasladarse voluntariamente para liberar la calle y el puente que une el sur y el norte de la ciudad, por lo que cuando finalmente se sustancie el traslado mejorarán las vías de comunicación urbana.
Esto posibilitará a la vez a la Unidad Provincial de Enlace y Ejecución de Proyectos con Financiamiento Externo (Upefe) poner en valor el puente. Se construyó en la primera etapa del plan macro de sistematización del arroyo, pero no se puede usar desde la instalación de las familias.