En el marco del Programa “Gestión de Medicamentos Vencidos y Productos Farmacéuticos Domiciliarios Caducos”, la Municipalidad de Neuquén logró recolectar 1800 kilos de medicamentos vencidos durante los primeros seis meses del año. La iniciativa tiene como objetivo evitar que estos productos terminen en sitios no adecuados, como basurales o espacios públicos.
Francisco Baggio, subsecretario de Medioambiente y Protección Ciudadana, explicó que estos remedios, que incluyen pastillas y jarabes, anteriormente «terminaban en un enterramiento, en la basura domiciliaria, en un baldío o en la calle». Ahora, gracias al programa, son depositados en recipientes especiales ubicados en farmacias adheridas.
Baggio comparó los resultados con los del año pasado: “En el primer semestre de 2023 habíamos recolectado 1200 kilos, y ahora esa cifra aumentó porque se han incorporado más farmacias en la ciudad de Neuquén”.
Una vez depositados en los contenedores, los medicamentos son recolectados por la empresa BASSA, que los trata como residuos patógenos, incinerándolos en hornos pirolíticos.
Baggio recordó que este programa innovador lleva dos años en funcionamiento en la ciudad y destacó que Neuquén es «una de las pocas ciudades del país que cuenta con este tipo de iniciativa». Subrayó, además, la importancia ambiental de gestionar correctamente los desechos farmacéuticos, ya que desecharlos en inodoros, lavamanos o directamente en el ambiente puede afectar el sistema cloacal, las plantas de tratamiento y, eventualmente, los cursos de agua como el río.