Neuquén.- A menos de 24 horas de ocurrido el hecho, la fiscal Eugenia Titanti formuló cargos contra un policía que, utilizando su arma reglamentaria, mató a otro joven. El acusado es Nicolás Leopoldo López, un efectivo de la policía de Neuquén con dos años de antigüedad.
Según relató Titanti, ayer 9 de marzo, cerca de las 15:20, López disparó y mató a Diego Escobar cuando este se encontraba en un taller en el que trabajaba, ubicado en la calle 12 de Septiembre de la ciudad de Neuquén.
La fiscal encuadró el hecho en el delito de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego, en calidad de autor. Como el acusado no se encontraba de servicio (lo había estado hasta el mediodía), no se aplica en este caso el agravante de la función policial.
El asistente letrado Bruno Micciulo argumentó que el imputado actuó con “total desprecio por la vida humana” y remarcó que “entró al taller bromeando y usando su arma a modo de chiste”. Aclaró que “este desprecio por la reglamentación y por su función nos hace pensar que si no pudo acatar eso, menos se someterá al proceso penal”. También argumentó que la pena en expectativa es alta, con un mínimo de 10 años y 4 meses de prisión, y que ante esa situación, el imputado podría evadir el proceso.
El juez de garantías tuvo por formulados los cargos tal como los presentó la fiscal, fijó el plazo de investigación en 2 meses y, tras descartar un pedido de detención domiciliaria que realizó la defensa, impuso la prisión preventiva por 4 meses.