Buenos Aires.- Un niño de 4 años murió este domingo al ser atropellado por una formación del tren Roca a la altura de la estación Bosques, en el partido de Florencio Varela.
Tras el accidente, los familiares del menor fallecido agredieron salvajemente al maquinista e intentaron incendiar el ferrocarril. «No pude hacer nada, la mamá no lo agarró», se defendió el conductor.
Según la investigación en curso, cerca de las 14, a los pocos minutos de haber salido de su casa en dirección a donde sería la fiesta, el menor, identificado como Thian Gadiel Alfaro, se alejó corriendo de su mamá, pero cuando intentó cruzar las vías, lejos del paso habilitado para ello, vio que la formación se acercaba y se quedó paralizado. El conductor, por su parte, no llegó a frenar y lo embistió.
Debido al impacto, el cuerpo del nene terminó a un costado del vehículo y su abuelo, que vive cerca de la estación, vio lo que sucedió y corrió a socorrerlo. El hombre levantó el cuerpo del pequeño del suelo y lo llevó a su domicilio, pero para ese momento ya había fallecido.
Fuentes cercanas al caso contaron que luego del accidente, un grupo de vecinos comenzó una protesta en el sitio y agredieron salvajemente al maquinista, a quien golpearon arrojándole piedras, e incluso en un momento intentaron prender fuego el tren con él adentro.
Sin embargo, los pasajeros de la formación impidieron el accionar de los atacantes y comenzó así una batalla campal en la que también quedaron involucrados un guardabarrera, que al igual que el conductor resultó con heridas de diversa gravedad.