Buenos Aires.- El presidente Alberto Fernández afirmó que las acusaciones sobre supuesto pedido de sobornos a Pfizer para compra de vacunas vertidas contra el Gobierno por la jefa del PRO, Patricia Bullrich, son «una difamación imperdonable».
El Jefe de Estado rechazó así las afirmaciones de Bullrich, quien también fue desmentida por Pfizer, y ratificó que demandará judicialmente a la ex ministra de Seguridad.
«Lo que dice es falso; nunca nadie le pidió a ningún laboratorio que haya un intermediario para vendernos vacunas. Nadie pidió sobornos ni nada parecido; no es un exceso político, es una difamación imperdonable», sostuvo Fernández.
El mandatario dijo que «voy a ir personalmente yo» a hacer la denuncia contra Bullrich en los Tribunales y «no voy a utilizar los abogados del Estado».
También ratificó que «voy a demandar civilmente y (lo que eventualmente cobre en un juicio por) los daños y perjuicios voy a donarlo al Instituto Malbrán».