Islandia.-Tras una intensa actividad sísmica desde hace tres semanas y una alerta de erupción, un torrente de lava brotó el viernes a las 20:45 horas de una grieta en el suelo en Geldingadalur, cerca de la montaña Fagradalsfjall, iluminando la noche con una nube roja.
El volcán había estado inactivo durante 6.000 años, y la península de Reykjanes no había visto la erupción de ningún volcán en 800 años.
En unas espectaculares imágenes de video grabadas este sábado por un helicóptero de los guardacostas, se veía fluir la lava, que abarca poco menos de 1 km2 de superficie, así como fumarolas de gas azul en el lugar de la erupción.
El aeropuerto internacional islandés de Keflavik y el pequeño puerto pesquero de Grindavik se hallan a pocos kilómetros de distancia, pero la zona está deshabitada y no se prevé que la erupción suponga un peligro.