Neuquén.- Esta mañana se llevó a cabo el desalojo de dos tomas del barrio Confluencia, pedido por el fiscal Marcelo Jara y emitido por el juez Diego Piedrabuena.
Los procedimientos fueron de forma simultánea a media mañana. Según las testimonios de los vecinos del barrio contaron que la policía ingresó sin previo aviso, destrozando las casillas y obligaron a las personas a irse sin poder sacar sus pertenencias.
Por otro lado el subsecretario de Seguridad, Gustavo Pereyra, desmintió estos hechos y explicó que los que originaron los enfrentamientos fueron los jóvenes del barrio.
Alrededor del mediodía la personal del Departamento Unidad Especial de Policía (UESPO) había avanzado con las máquinas y destruido casi todas las viviendas precarias que había en el terreno. Además de formar un cordón de seguridad desde donde disparaban balas de goma y gases lacrimógenos a los vecinos que se resistían y los enfrentaban con gomeras.
Pasada las 14, la policía tuvo que retroceder debido al ataque y la gente volvió a tomar el lugar.