Neuquén.- Con cuatro acusados de la Comisaría Primera de Neuquén sentados en el banquillo de los acusados comenzó el juicio por la golpiza a Facundo Agüero currida el 8 de marzo del año pasado en un edificio del alto neuquino.
El joven de 23 años aún permanece internado con una enfermedad incurable. El inicio del proceso judicial contó con la presencia de María Luján Rey, mamá de Lucas Mengihini, víctima de la tragedia de Once y Matías Bagnato, único sobreviviente de la tragedia de Flores, como representantes del observatorio de Víctimas de Delitos. Ambos llegaron a Neuquén para seguir de cerca el caso y apoyar a la madre de Facundo, Adelina Rivas.
Pablo José Escudero se arrodilló sobre el joven cuando estaba esposado boca abajo y fue lo que le generó “un cuadro de encefalopatía hipoxico-anóxica, lesiones que produjeron una enfermedad mental y corporal incurable. Por ello, Escudero fue acusado por vejaciones y lesiones gravísimas. En el caso de Lucas Medina se le atribuyó el delito de humillación y a Romualdo Mardones el mismo y con lesiones leves. Los tres fueron exonerados de la fuerza provincial.
Por último, Juan Alberto Rubilar será juzgado por vejaciones y lesiones gravísimas por omisión impropia, es decir, por haber presenciado la agresión y no haber detenido a los efectivos.