Neuquén.- A partir de mañana, la represa de El Chocón será la primera del sur y la segunda del país en contar con una señal especial, que la protegerá de ataques en caso de que se desate una guerra. Se los conoce como “escudos naranjas”, una marca internacional con la que se indican los lugares que no pueden ser blancos de operativos militares.
Tres grandes círculos naranjas, uno al lado del otro, serán los símbolos que verán las fuerzas militares contrarias, en caso de que Argentina fuera parte de un conflicto bélico. Cada uno se pintará de forma que queden lo más visible posible y todas las veces que sea necesario. En Salta se ubica la otra y única represa del país que ya cuenta con esta marca, porque la región se sumará a esta protección especial.
El arreglo forma parte del Protocolo I de los Convenios de Ginebra, que fue firmado por grandes potencias militares como Estados Unidos, Rusia y China, e incluso Corea del Norte. Entre los motivos se enumeran distintos puntos como: la comprobación de que las centrales son utilizadas para dar apoyo a operaciones militares y sólo “si tales ataques son el único medio factible de poner fin a tal apoyo”. Lo mismo ocurre con otros objetivos de guerra que se encuentren dentro de las instalaciones protegidas. Incluso dentro de estas excepciones, se ordena tomar las precauciones necesarias para evitar que se liberen las “fuerzas peligrosas” y que se dañe a la población civil. A la vez, se indica a los países comprometidos a no ubicar “objetivos militares en la proximidad de las obras o instalaciones mencionadas”.
La señalización como infraestructura según el Derecho Internacional Humanitario está a cargo del ministerio de Defensa de la Nación, en coordinación con el Organismo Regulador de Seguridad de Presas Nacionales (ORSEP) y el acuerdo de la empresa italiana que tiene a cargo la represa, Enel.