Río de Janeiro, Brasil.- Las balas que usaron los asesinos de la concejal brasileña, Mairelle Franco, y su chofer, Anderson Gomes, pertenecían a la Policía Federal, según determinaron las pericias.
La confirmación agrega más fuerza a la hipótesis de que agentes de seguridad estén por detrás del ataque perpetrado el miércoles en Río de Janeiro.
La conmoción nacional sobre la ejecución de la dirigente social negra de las favelas coincide con el primer mes de la intervención militar decretada por el presidente Michel Temer para que el Ejército se haga cargo de la seguridad pública y, por ende, maneje a la policía local.
La revelación de que las balas asesinas de la dirigente del opositor Partido Socialismo y Libertad (PSOL) tuvieron su origen en un desvío de la Policía Federal agrega más datos a la práctica de la corrupción policial mezclada con el crimen organizado.