La Oficina de Inteligencia Naval de Estados Unidos realizó un informe en el que sostiene que el submarino ARA San Juan, desaparecido desde el pasado 15 de noviembre y con 44 tripulantes a bordo, habría sufrido una implosión en 40 milisegundos, y que por tal motivo los marinos murieron instantáneamente.
Por su parte, desde la Armada Argentina indicaron que «no tienen nada para decir» acerca de esta publicación y reiteraron que la información acerca del sumergible continúa por medio del vocero de la fuerza, Enrique Balbi.
A casi dos meses de la desaparición de la nave, aún no se pudo establecer ningún rastro que permita encontrarla. «La señal de sonido detectada el 15 de noviembre de está bien relacionada con la desaparición del sumergible, dice en un informe la Oficina de Inteligencia Naval de los EE. UU. (ONI)», según publica el sitio francés Le Monde.
La entidad, que se basa en los datos recopilados por la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares, afirma que el ruido registrado el 15 de noviembre de 2017 fue producido por la implosión del San Juan a una profundidad unos 400 metros, motivo por el cual se liberó energía equivalente a la producida por una explosión de casi seis toneladas de TNT.
En el texto prosiguen con la descripción de esta nueva hipótesis, y agregan que el casco del sumergible, debido a la presión a esta profundidad, se pulverizó por completo en «40 milisegundos» y se hundió «verticalmente» a una velocidad de 10 a 13 nudos.
Por tal motivo, para la oficina estadounidense es «imposible» que los 44 marineros argentinos a bordo hayan estado al tanto del hecho. «No sufrieron, no se ahogaron. Su muerte fue instantánea», sostienen.