Buenos Aires.- Mauricio Macri ya decidió que pasará a retiro al almirante Marcelo Srur, jefe de la Armada Argentina, pero antes de ejecutar esa decisión política optó por privilegiar la búsqueda del submarino ARA San Juan y sus 44 tripulantes, que desaparecieron sin dejar rastros en medio del Atlántico Sur.
Macri confía más en la ayuda internacional que en la capacidad de la marina para dilucidar una tragedia que todavía no sabe cómo se inició, pero que sí supone cómo terminará.
Por eso, el Presidente aún duda en reemplazar a Srur por otro almirante, o directamente intervenir a la Armada designando a un secretario naval para demostrar su malestar político y personal.